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Introducción Guía TAO

 

En esta guía trataremos una serie de temas importantes que le ayudarán a mejorar el control de su tratamiento anticoagulante oral (TAO).

 

Probablemente sufra simultáneamente distintas patologías o enfermedades que hacen que además del tratamiento anticoagulante tome otros medicamentos, pero es fundamental que entienda claramente que los anticoagulantes orales no son igual que otros medicamentos. Por ello siempre que acuda a visita médica comunique a su médico que toma anticoagulantes orales, especialmente si le van

a recetar otro medicamento o le van a realizar alguna exploración invasiva.

 

 

El objetivo del tratamiento anticoagulante oral es la prevención de las trombosis y de las embolias y se administran tanto a pacientes que ya han tenido, como a los que tienen riesgo de tenerlas.

 

Si toma anticoagulantes orales debe tener en cuenta que se trata de un tratamiento preventivo pero no curativo. Por su forma de actuar disminuye mucho el riesgo de sufrir trombosis si se controla adecuadamente, pero a costa de un pequeño riesgo hemorrágico, por lo que deberá colaborar y tener en cuenta nuestros consejos para disminuir ese riesgo.

Es muy importante que lea esta guía con detenimiento para tener el máximo conocimiento posible que le permita un mejor control.

 

Si después de leer esta guía siente preocupación o desea recibir más información sobre algún tema, consulte con los profesionales sanitarios de su hospital de referencia o de su Centro de Salud.

 

La Coagulación

 

La coagulación es un mecanismo de defensa fisiológico que poseen todos los humanos y la mayoría de animales cuya función es evitar que se produzcan pérdidas sanguíneas cuando existen traumatismos.

La coagulación comprende todo el proceso relacionado con la formación del coá-gulo que actúa como un tapón deteniendo el sangrado.

 

¿Qué es un trombo?

 

En ocasiones se forman coágulos no deseados en las cavidades del corazón o los vasos del organismo a los que llamamos trombos. Cuando una porción de dicho trombo se desprende y tapona un vaso (vena o arteria) hablamos de embolia.

 

¿Cómo se fabrica el coágulo?

 

Con la ayuda de los factores de coagulación que son unas proteínas que hay en la sangre y que se producen en el hígado con la ayuda de la vitamina K

 

Los anticoagulantes orales

 

Los anticoagulantes orales son un grupo de medicamentos que se administran para evitar la formación de coágulos no deseados (trombos). Actúan haciendo que la sangre tarde más tiempo en coagular, al impedir que la vitamina K pueda ser utilizada por el hígado para formar alguno de los factores de la coagulación. Estos medicamentos no pueden disolver los coágulos ya formados. Sin embargo, pueden impedir que los coágulos existentes se agranden y causen problemas más serios.

 

Hay varios tipos de anticoagulantes orales o antivitamina K: acenocumarol (Sintrom“) y warfarina (Aldocumar“, Tedicumar“). Los anticoagulantes alcanzan su efecto máximo al cabo de 36h tras la ingestión. La diferencia entre los distintos fármacos anticoagulantes estriba en la rapidez de su acción. De todos ellos, el Sintrom es el que mantiene su efecto menos tiempo y en España es el más utilizado.

 

 

PRINCIPIO ACTIVO NOMBRE COMERCIAL PRESENTACIÓN

 

Acenocumarol Sintrom 1mg

Sintrom 4mg

 

Warfarina Aldocumar 1

(Aldocumar o Tedicumar)

Aldocumar 3

Aldocumar 5

Aldocumar 10

 

Debe fijarse en cual le ha prescrito, utilizar siempre la misma presentación y tomar exactamente lo que le indica su médico hasta el siguiente control.

 

Debe asegurarse de que cuando su médico le habla de “cuartos” y de “medios” se refiera a la misma presentación del anticoagulante prescrito.

 

Este ejemplo da una idea de la importancia de este tema:

1 comprimido de Sintrom 4 = a 4 de Sintrom 1= De cada uno de los diferentes tipos de anticoagulantes orales existen distintas presentaciones.

 

¿Quién tiene que tomar anticoagulantes orales?

 

– Pacientes que han sufrido ya alguna trombosis o embolia para evitar que se repita.

 

– Personas que NO han tenido trombosis o embolia, pero tienen algún problema que les hace tener riesgo de presentarlas:

 

– Enfermedades cardiacas (arritmias, válvulas mecánicas, dilatación cardiaca, enfermedades de las válvulas y otras).

 

– Enfermedades hereditarias de la sangre (déficit de proteína C o S, mutación del factor V Leiden y otras).

 

¿Cómo debe tomar los anticoagulantes?

 

Dado que los anticoagulantes no siempre producen el mismo efecto y aumentan la susceptibilidad al sangrado es necesario realizar controles (análisis) periódicos que son imprescindibles.

 

Cada paciente necesita una cantidad determinada para conseguir el efecto deseado.

 

Si esa dosis es elevada no quiere decir que esté peor que otro que necesite menos dosis.

 

 Simplemente es la dosis que necesita.

 

Para que el tratamiento sea efectivo y evitar complicaciones, debe de seguir estrictamente la dosis que le ha recomendado su médico.

 

¿Cómo se controla la dosis adecuada de anticoagulante?

 

Como ya hemos comentado, la dosis que necesita de anticoagulante no siempre es la misma, se modifica o mantiene en función del resultado que da el análisis en sangre (capilar o venosa) de la INR (razón o ratio normalizado internacional).

 

La INR guarda relación con el tiempo que tarda la sangre en coagularse:

 

– Una persona que no toma anticoagulantes tiene una INR de 1.

– Un valor de 2 indica que el tiempo que tarda su sangre en coagularse es el doble del de una persona normal. De 3 será el triple etc.

 

– Los anticoagulantes aumentan la INR, es decir el tiempo que la sangre tarda en coagular.

 

– Es muy importante utilizar los anticoagulantes de tal manera que se mantenga una protección máxima contra la formación de coágulos con el mínimo riesgo de hemorragia.

 

– Por eso es necesario que la coagulabilidad de la sangre esté en un rango favorable que no sea ni demasiado bajo ni demasiado alto. Esto es el llamado rango terapéutico.

 

Existen distintos rangos terapéuticos. Acada paciente, de forma individualizada y en función del motivo de la anticoagulación, se le asigna un rango siguiendo las recomendaciones internacionales.

 

Así los enfermos que tienen:

 

– Mayor riesgo de trombosis se les asigna un rango mayor (entre 2,5 y 3,5 ó entre 3 y 4).

 

– Menor riesgo de trombosis se les asigna un rango menor (entre 2 y 3).

 

Si sus valores de INR no están dentro del rango terapéutico que le han asignado deben corregir la dosis de anticoagulante.

 

– Los valores de INR por debajo del rango indican que existe riesgo de trombosis.

– Los valores de INR por encima del rango indican que existe riego de hemorragia.

 

Los controles (análisis) son necesarios siempre que tome anticoagulantes orales debido a que el efecto de los mismos puede verse interferido por diversas circunstancias (otras enfermedades, hábitos dietéticos, nuevas medicaciones...).

 

¿Cuándo deben tomarse los anticoagulantes?

 

Debe procurar tomarlo siempre a la misma hora, le ayudará a crear una rutina y así será más fácil recordar la toma.

 

Es preferible que lo haga por la tarde o noche porque podrá modificar, si es necesario, la dosis el mismo día del control.

Para evitar interferencias con los alimentos se recomienda tomarla al menos una hora antes de la cena.

 

¿Qué debe hacer cuando olvide una dosis?

 

En caso de dudas u olvidos con la dosificación ha de consultar siempre con su médico.

 

– Si olvida tomar la dosis a la hora habitual puede hacerlo a otra hora.

 

– Si a lo largo del día se da cuenta de que ha tomado una dosis inferior a la que le correspondía puede corregirlo tomando la cantidad que le falta.

 

– Si no se acuerda hasta el día siguiente prescinda de la dosis que no tomó y tome la que le corresponde al día en el que está. En ningún caso tome el doble para compensar.

 

– Si le tocaba descansar (no tomar anticoagulante oral) un día y no lo hizo hágalo al día siguiente.

 

Para evitar equivocaciones recomendamos tachar diariamente en el calendario la dosis que se toma una vez que lo haga y poner medicación, calendario y lapicero juntos y a la vista siempre en el mismo sitio.

 

Ha de saber que si usted dejó de tomar una dosis o alteró la cantidad en los días previos al control es posible que el resultado salga alterado y su médico haga cambios en su medicación que usted no precisa. Por ello, en su propio beneficio, debe avisar de los errores cometidos especialmente si fueron en los días anteriores al análisis de control.

 

¿Cada cuánto deben realizarse los controles?

 

 

Desde que empieza el tratamiento con anticoagulantes orales y hasta que se estabiliza su dosis puede ser necesario realizar controles con mayor frecuencia.

 

En general el primer control se le realiza a los 4 días de haber iniciado el tratamiento y a los 5-7 días tras el primer control.

Posteriormente y una vez alcanzada una dosis estable para usted, los controles podrán efectuarse cada 4-6 semanas, según crea conveniente su médico. Si el valor del INR esta fuera del rango terapéutico su médico le cambiará la dosis y adelantará la fecha de control.

 

Para realizarse el control no es necesario que acuda en ayunas. En ocasiones,podrá aprovechar el pinchazo para realizarse otros análisis que tenga pendientes.

 

¿Dónde puede realizarse el control del TAO?

 

Al inicio del TAO y hasta que su dosis se estabilice, generalmente en 3-4 meses. Será el hematólogo el que ajuste la dosis. Una vez estabilizado, consulte con su médico sobre otras posibilidades de control(control en Atención Primaria en el Centro de Salud y autotratamiento), se le informará y aconsejará sobre cual es la mas adecuada para usted.

 

Problemas que pueden surgircon el tratamiento anticoagulante

 

La mayor y más frecuente complicación de los anticoagulantes orales es el sangradoanormal o la hemorragia. Los anticoagulantes hacen que el sangrado que se produciría en condiciones normales por cualquier motivo, sea más abundante. Además, facilitan el sangrado por zonas en las que existe predisposición a sangrar.

 

En general, suele tratarse de sangrados leves por la nariz, las encías o hematomas con pequeños golpes. La aparición de hemorragias más importantes son menos frecuentes, pero por su repercusión es importante que acuda al Servicio de Urgencias.

 

Otros efectos secundarios asociadas al tratamiento son: reacciones alérgicas, caída de pelo, etc. que pueden solucionarse cambiando de anticoagulante. Para poder evitar o disminuir estos problemas es necesario que tome adecuadamente la dosis de anticoagulante que le han indicado, acudir a los controles analíticos y seguir las recomendaciones que le hayan realizado.

 

¿Qué debo hacer ante una hemorragia?

 

Si se produce una herida sangrante:

 

– Comprima la zona de la herida con una gasa estéril durante

al menos 15 minutos de forma intensa y continuada.

 

– Si está medida no es suficiente para que se detenga la hemorragia o la herida es de gran tamaño, precisa puntos o está sucia, diríjase al Servicio de urgencias más cercano.

 

– También tras sufrir un traumatismo se puede producir un hematoma interno sin cambio de la coloración en la piel, pero con hinchazón de la zona dañada, debe acudir al Servicio de Urgencias más cercano.

 

Si presenta un sangrado por la nariz deberá:

 

– Hacer presión sobre la fosa que está sangrando hasta que cese la hemorragia.

 

– Comprobar su tensión arterial, si está elevada podría ser la causa.

 

– Si no cesa la hemorragia acuda a su centro de salud.

 

Si presenta un sangrado por encías:

 

– Las encías sangran con facilidad, normalmente puede ocurrir tras el cepillado

de dientes por lo que hay que ser cuidadoso en el cepillado.

 

– Si el sangrado es cuantioso acuda a su centro de salud .

 

– Consulte con su dentista.

 

Si presenta una hemorragia en el ojo:

 

– La aparición de una hemorragia en la parte blanca del ojo no suele tener importancia, comuníquelo cuando acuda al control.

 

– Vigile su tensión arterial ya que en ocasiones es la causa.

 

– Si nota pérdida brusca de visión debe acudir al Servicio de Urgencias del Hospital que le corresponda.

 

Si presenta sangre en la orina o tiene un sangrado vaginal anormal solicite que se

le adelante el control y comuníquelo.

 

Si nota sangre en las heces:

 

– Si es sangre roja pueden deberse a hemorroides pero también podría deberse a otras causas, cuando acuda al control habitual comuníquelo a su médico.

 

– Si las heces son negras y no está tomando hierro, debe de acudir al Servicio de Urgencias del Hospital que le corresponda pues podría tratarse de una úlcera sangrante.

 

Si presenta un vómito con sangre roja deberá acudir al Servicio de Urgencias.

 

Si presenta un dolor de cabeza muy intenso de aparición súbita o tiene dificultad para hablar, trastornos de la visión (pérdida total o parcial, visión doble), desviación de la boca, pérdida de fuerza o equilibrio, sensación de hormigueo en los brazos o las piernas, vaya inmediatamente a urgencias y diga que recibe tratamiento anticoagulante.

 

Adjunte toda la documentación que le sea posible, la hoja de tratamiento, informes, la cartilla, etc. Estos síntomas pueden deberse a lesiones en el cerebro tanto de origen trombótico como hemorrágico. Cualquier sangrado en cantidad importante ya sea espontáneo o después de un traumatismo es motivo de acudir al Servicio de Urgencias inmediatamente, indicando que usted toma medicación anticoagulante para que se tomen las medidas oportunas para frenar la hemorragia y tratar el problema que la causa.

 

Alimentación y trastornos digestivos

 

¿Qué dieta debo seguir?

 

¿Hay alimentos prohibidos?

 

Puede comer de todo, de forma variada y equilibrada, sin cambios bruscos. Si va a comenzar una dieta que incluya más verduras (coles, lechuga, espinacas, brócoli, tomate, espárragos, brécol, repollo y otros vegetales de hoja verde...) de las que esté habituado a consumir, puede influir en la dosis de anticoagulante (ya que contienen vitamina K) sobre todo al principio, por lo que debe de comunicarlo a su médico responsable.

 

Es posible que le hayan prohibido algunos alimentos por otras causas como pueden ser las dietas por tensión alta, colesterol o diabetes, respete estas prohibiciones independientemente de que siga TAO.

Evite tomar preparados de herboristería y suplementos vitamínicos ya que algunos interfieren de forma importante con la medicación anticoagulante. En definitiva debe de comer de todo y de forma variada.

 

¿Puedo tomar alcohol?

 

Debe de evitar el consumo de alcohol, pero puede tomar vino en cantidad moderada acompañando a las comidas siempre que no se le hayan restringido por otrosmotivos. Evite las bebidas más fuertes y los excesos, pueden llegar a hacer imposible el control del tratamiento.

 

¿Puedo fumar?

 

El tabaco es nocivo para la salud por lo que

debe evitarse y además puede disminuir el

efecto de los anticoagulantes.

 

¿Qué debo hacer si tengo vómitos o diarrea?

 

Debe tener en cuenta que la medicación se absorbe por el aparato digestivo. Si la vomita inmediatamente después de tomarla no le va a hacer efecto por lo que tendrá que repetir la toma. Si vomita una hora después y ante la duda de que lo haya absorbido no vuelva a tomarla, telefonee al centro donde se controla, él le dirá si debe adelantar el control.

 

En caso de diarrea que persista más de dos días es posible que necesite un ajuste del tratamiento, comuníquelo al médico que le controla su tratamiento

 

Fármacos que interfieren con los anticoagulantes orales, es importante que nunca se automedique y que advierta a cualquier médico que precise recetarle alguna medicación que usted toma medicación anticoagulante, para que le receten medicamentos que interfieran lo menos posible con el tratamiento. Si necesita un analgésico de forma ocasional puede tomar los que están compuestos por PARACETAMOL.

 

Salvo las medicaciones que aparecen como “ No interferencia” y que figuran en la Tabla de interacciones medicamentosas, que encontrará al final de esta Guía, debe comunicar siempre los cambios en sus tratamientos, tanto al inicio como al interrumpirlos. En su centro le comunicarán si es necesario cambiar la cita del control, en ocasiones es necesario realizar un control al cabo de 5-7 días de iniciar o interrumpir un fármaco.

 

Cuando realice cambios en la medicación, el día del control debe de traer el prospecto o caja para poder conocer el nombre correcto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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